TRANSICIÒN POLÌTICA Y REALIDADES SOCIALES
Transición política
Aprendizaje esperado: Reconoce las causas del descontento y el proceso de la transición política en el México actual.
Énfasis: Reconocer las reformas electorales y el proceso de la alternancia política en las últimas cuatro décadas.
¿Qué vamos a aprender?
Como recordarás, en sesiones pasadas se abordaron los temas de la crisis económica de los años ochenta y el inicio del modelo neoliberal en la economía mexicana. Es en este contexto de globalización económica que México experimentó una alternancia política. A partir de ese momento, la sociedad mexicana pudo elegir entre diversos candidatos para los cargos de elección popular y ya no fue necesario pertenecer exclusivamente al partido oficial para formar parte de los grupos de poder, en este caso, el PRI.
La democratización política no fue fácil, las reformas electorales que permitieron la alternancia política se llevaron a cabo paulatinamente gracias a la presión constante de la ciudadanía y de las organizaciones sociales, así como los grupos de oposición. Por ello, a lo largo de esta sesión conocerás sobre las reformas electorales más importantes efectuadas en los últimos cuarenta años, así como sus causas, consecuencias y limitantes.
¿Qué hacemos?
Conoce algunos conceptos importantes que repetirás a lo largo de esta sesión.
El primer concepto es DEMOCRACIA. La etimología de la palabra proviene del griego demos, pueblo y kratos, gobierno, es decir, el gobierno del pueblo.
Los investigadores sociales han establecido una infinidad de significados para este concepto. Para el tema de esta sesión partirás de que la democracia política se caracteriza por la participación ciudadana para decidir libremente quienes serán sus gobernantes.
Están también los conceptos de VOTO y SUFRAGIO. Al igual que la democracia, estos tienen diferentes significados, el sufragio es el derecho que tienes de votar y participar. El voto es la expresión, pública o secreta, de una preferencia personal ante una opción. En términos generales se puede decir que voto y sufragio están íntimamente relacionados.
A la mujer u hombre que participa en la elección democrática de representantes populares se les denomina electores, es decir, “los que deciden” o “los que eligen”.
Cabe señalar que la apertura democrática en México es un fenómeno reciente ya que fue hasta finales de siglo pasado que se iniciaron las primeras alternancias políticas en algunos estados y en ciertas legislaturas locales. Antes de la década de 1990, prevaleció un régimen de partido único el cual controlaba las elecciones de tal forma que siempre resultaba vencedor en cualquier votación de país.
Para responder las siguientes preguntas, ¿qué institución se han encargado de organizar las elecciones de los representantes populares? ¿Cuáles han sido sus funciones? ¿Qué entiendes por alternancia política?
Leerás un fragmento del libro “Fortalezas y debilidades del sistema electoral mexicano. Perspectiva federal y local”. El autor es Luis Carlos Ugalde ex consejero presidente del Instituto Federal Electoral.
Pon atención en las fechas de las reformas electorales, así como las características del Instituto Federal Electoral, hoy transformado en el Instituto Nacional Electoral.
“México experimentó 11 reformas electorales entre 1977 y 2014. Ocho fueron de amplio alcance e implicaron cambios constitucionales y legales: 1977, 1986, 1990, 1993, 1994, 1996, 2007 y 2014, mientras que tres fueron focalizadas a aspectos puntuales y requirieron sólo modificaciones legales: la del 2002 para establecer cuotas de género en candidaturas legislativas, la del 2003 para elevar los requisitos para formar partidos políticos y la del 2005 para regular el voto de los mexicanos en el extranjero. […]
El reformismo electoral mexicano es reflejo de un proceso de cambio político que buscó pluralismo como la meta principal y encontró en las reformas electorales la vía para conseguir su cometido. La obsesión por el pluralismo es consecuencia de la hegemonía política de un partido oficial durante buena parte del siglo xx y de la exclusión que padecieron grupos políticos, activistas sociales y segmentos de la población. […]
Además del pluralismo, el reformismo electoral mexicano ha buscado otros objetivos que han ido cambiando a lo largo del tiempo: inclusión (notoriamente en las reformas de 1977, 1986 y 1990), certeza y transparencia (1990, 1993, 1994), equidad (1993, 1996, 2007), imparcialidad de la autoridad (1994 y 1996) y legalidad (1986, 1996). […]
El […] objetivo del reformismo electoral fue la imparcialidad de las autoridades electorales. El ife nació como un organismo público cuyo órgano de gobierno —el Consejo General— estaba integrado en 1990 por seis consejeros magistrados, representantes de los partidos políticos y de las cámaras legislativas. El presidente era el secretario de Gobernación. En 1994 se dio un paso significativo cuando se les quitó voto a los representantes de los partidos y se nombró a seis consejeros ciudadanos por mayoría calificada de la Cámara de Diputados. Pero el paso definitivo ocurrió en 1996 cuando el instituto se volvió autónomo: la presidencia dejó de ser ocupada por el secretario de Gobernación y su lugar fue tomado por un consejero presidente elegido también por mayoría calificada de la Cámara de Diputados, al igual que los otros ocho consejeros electorales. […]
El reformismo electoral mexicano ha sido exitoso para propiciar el pluralismo político que hoy vive México. Aunque no se trata sólo de un asunto de reglas del juego, sino también de una exigencia de la sociedad por mayores canales de participación, las reformas electorales facilitaron que esa demanda social se tradujera en una nueva conformación política de los órganos de gobierno. Las reformas electorales también gestaron mayor confianza en la integridad del sistema político, pero esa legitimidad de lo electoral se ha deteriorado en los últimos años. […]”
Según el texto, México experimentó un proceso de reformas electorales en las últimas décadas del siglo XX y las primeras del XXI.
Observa la siguiente línea del tiempo.
Entre 1977 y 2014 en México se llevaron a cabo 11 reformas electorales, durante los siguientes sexenios:
Período presidencial de 1976 a 1982.
En el gobierno de José López Portillo.
Período presidencial de 1982 a 1988.
Con el gobierno de Miguel de la Madrid Hurtado.
Período presidencial de 1988 a 1994.
En la administración de Carlos Salinas de Gortari.
Período presidencial de 1994 a 2000.
Durante el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León.
Período presidencial de 2000 a 2006.
En la administración de Vicente Fox Quezada.
Período presidencial de 2006 a 2012.
Durante el gobierno de Felipe Calderón.
Período presidencial de 2012 a 2018.
En la administración de Enrique Peña Nieto.
Inicia en 1977. Durante el gobierno de José López Portillo se anunció una reforma política, la cual abrió espacios a los partidos de oposición. Esto se debió, principalmente, a que durante de la contienda electoral por la presidencia no hubo ningún otro candidato más que él.
Ante el desencanto electoral que manifestaba la población del país, el secretario de gobernación, Jesús Reyes Heroles, promovió la participación de los diferentes sectores de la sociedad para formar una consulta sobre los cambios que necesitaba el sistema político. Dichas aportaciones se plasmaron en la Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales, mejor conocida como LOPE.
Esta ley tuvo diferentes objetivos, siendo los más importantes.
1.- El reconocimiento oficial de los partidos políticos como intermediarios “necesarios” de la vida democrática. Este punto es importante porque, anteriormente, algunas organizaciones políticas se encontraban dentro de la ilegalidad, como fue el caso del Partido Comunista Mexicano. Con la nueva ley, esta agrupación logó que algunos de sus miembros formaran parte del Congreso de la Unión.
2.- El aumento del número de diputados por representación proporcional, es decir, todos los partidos que participaran en las elecciones tendrían un representante en el Congreso de la Unión aunque no hubiesen ganado la elección ni obtenido la mayoría de votos
En la reforma de 1977 existen dos características. Primera, el reconocimiento de los partidos políticos como intermediarios de la vida democrática. Segunda: el aumento de diputados por representación proporcional.
Durante la década de los ochentas, por primera vez el Partido Acción Nacional (PAN) logró derrotar al PRI en unas elecciones locales, al obtener los gobiernos de la capital del estado de Chihuahua y de Ciudad Juárez. Estos hechos fueron evidencia de la contribución de la LOPPE a la alternancia política en México.
En 1986, durante la presidencia de Miguel de la Madrid, se expidió el Código Federal Electoral que básicamente permitió la coalición o alianzas entre los partidos políticos y fortaleció la representación proporcional.
Además, se fundó el Tribunal de lo Contencioso Electoral Federal, es decir, una institución que regulaba la vida y los procedimientos electorales. En 1985 la Ciudad de México y otras entidades sufrieron un terremoto que obligó a la sociedad a organizarse para el rescate de las víctimas del desastre. Luego de la solidaridad y capacidad de organización demostradas por la población, se fundaron diversas asociaciones para defender los derechos sociales, laborales y políticos.
En 1988 se llevaron a cabo las elecciones presidenciales con tres contendientes, Cuauhtémoc Cárdenas, candidato del Frente Democrático Nacional, Manuel Clouthier, representante del PAN, y Carlos Salinas de Gortari, del PRI, quien contaba con el apoyo de todo el aparato de gobierno.
Después de la jornada electoral, tras una serie de irregularidades en el sistema de conteo de votos, se declaró presidente a Salinas. Ante la sospecha de un fraude, Cárdenas y Clouthier impugnaron los comicios.
Cabe aclarar que la Comisión Federal Electoral era la responsable de organizar las elecciones durante ese periodo. Dependía directamente de la Secretaría de Gobernación, es decir, era una institución del gobierno y, por lo tanto, favorable al partido en el poder.
La reforma electoral de 1986, como característica la expedición del Código Federal Electoral, donde se destacan: las coaliciones partidarias, el fortalecimiento de la representación proporcional y la fundación del Tribunal de lo Contencioso Federal Electoral.
Tras la denuncia de fraude en 1988, la sociedad estaba desencantada y proliferaron los movimientos de protesta y las manifestaciones en contra del resultado de las elecciones, lo que tuvo repercusiones en la apertura política. Así, en 1989, el PRI se vio obligado a reconocer el triunfo de Ernesto Ruffo, candidato del PAN a la gubernatura de Baja California, quien fue el primer gobernador en México de extracción no priista.
En este contexto se expidió en 1990 el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, el cual estableció la creación de un instituto que regulara las elecciones. Así nació el Instituto Federal Electoral, IFE.
Sin embargo, se nombró como presidente del IFE al entonces secretario de gobernación, que pertenecía al PRI. Entre las atribuciones del IFE destacaban fijar topes en los gastos de campaña, expedir credenciales para votar sin fotografía y constancias de mayoría a quienes ganaran elecciones. También validaba o invalidaba las elecciones.
En estas condiciones político electorales, el PAN ganó su segunda gubernatura, en Chihuahua, en 1992. Con ello se reafirmó el proceso de alternancia política.
Reforma de 1990, el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, Cofipe, cuyo objetivo principal fue la creación del Instituto Federal Electoral.
En 1994, año electoral, fue asesinado el candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio. Hubo sospechas de que fue un suceso planeado desde las altas esferas del gobierno, lo que sembró el temor y la desconfianza en los procesos electorales entre la población. En su lugar fue nombrado Ernesto Zedillo, quien había sido el coordinador de campaña de Colosio.
En ese año se realizó otra reforma electoral en la que el IFE, por primera vez, se integró por algunos consejeros ciudadanos. Entre otras innovaciones el IFE utilizó tecnología para el cómputo de votos y estableció, por primera vez, debates para los candidatos presidenciales.
En 1994, hubo una reforma constitucional al artículo 41. El objetivo era ciudadanizar al IFE.
En 1996 otra reforma electoral propuso que la presidencia del IFE estuviera a cargo de un ciudadano. También el IFE tendría la función de capacitar a ciudadanos para que ellos organizaran las elecciones, es decir, el gobierno ya no lo haría. Las credenciales del IFE ahora tendrían fotografía.
La autonomía que se dio al IFE tenía entre sus objetivos contrarrestar las prácticas fraudulentas y darle independencia del gobierno y del partido oficial. Esto favoreció que los partidos de oposición ocuparan cada vez mayores espacios en los cargos de representación.
Con esta ley, y por primera vez en setenta años, el PRI dejó de tener mayoría en la cámara de diputados en 1997. Ese mismo año Cuauhtémoc Cárdenas, candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), fue elegido como el primer Jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
En el año 2000 el PRI perdió las elecciones presidenciales ante Vicente Fox Quezada, candidato del Partido Acción Nacional, quien se convirtió en el primer presidente de un partido de oposición al imponerse ante sus contrincantes, el priista Francisco Labastida y Cuauhtémoc Cárdenas del PRD.
Este hecho consolidó el proceso de transición democrática y dio paso a una nueva etapa de la política mexicana, caracterizada por la alternancia de partidos en el poder.
Así, con un presidente de la República ajeno al partido oficial y una pluralidad partidista en el Congreso, el IFE ganó aceptación y reconocimiento como árbitro confiable de la contienda electoral.
En la reforma de 1996 el IFE, su objetivo fue ciudadanizar la organización de las elecciones.
Durante once años, entre 1996 y 2007, las reformas electorales se centraron en aspectos puntuales y requirieron modificaciones legales, como se afirma en el texto leído al inicio de la sesión.
En el año 2006, durante las elecciones presidenciales se enfrentaron Felipe Calderón, por parte del PAN, Andrés Manuel López Obrador, por el lado del PRD y Roberto Madrazo, representado al PRI.
En esta contienda se denunciaron numerosas anomalías y violaciones al proceso electoral, como campañas de propaganda “negra” o “de odio”, los empresarios compraron tiempos en medios de comunicación apoyando directa e indirectamente a ciertos candidatos. El presidente Fox previamente se había expresado en contra del candidato perredista y, por si fuera poco, el presidente del IFE y sus consejeros se mostraban tibios en la aplicación de la ley electoral.
Como resultado, en aquellas elecciones la diferencia del primero y el segundo lugar no llegó ni al 1% de los votos totales. El IFE declaró triunfador a Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador denunció un fraude electoral, pidió que se reabrieran las urnas y se volvieran a contar todos y cada uno de los votos. Al lograr el recuento en algunas casillas la diferencia se cerró más y provocó descontento no solo en los seguidores de López Obrador sino en una buena parte de la ciudadanía, lo que se manifestó con protestas sociales.
La falta de legitimidad de Felipe Calderón y una clara desconfianza en el IFE, provocó que en 2007 se hiciera una nueva reforma electoral, en la que se establecía la reducción de los gastos de campaña de los partidos políticos. Además, el IFE, y ya no los partidos, compraría tiempo en radio y televisión, asimismo fiscalizaría el dinero de los partidos, es decir, inspeccionaría en qué gastarían el dinero las organizaciones políticas.
En la reforma de 2007, la asignación de gasto a los partidos políticos se reduce; dos, los tiempos de radio y televisión los contratará el IFE; tres, el IFE fiscalizará los gastos de campaña de los partidos políticos.
Durante las elecciones presidenciales del 2012 el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, ganó la contienda con un margen amplio respecto al segundo lugar, el otra vez candidato del PRD Andrés Manuel López Obrador. Este último argumentó que Peña Nieto había rebasado los topes de campaña, es decir, había gastado más dinero de lo que permitía el IFE.
Debido al pacto que hizo Peña Nieto con el resto de partidos políticos, las quejas electorales de López Obrador no hicieron eco en las cámaras de diputados y senadores. Nuevamente el descontento de un sector de la ciudadanía se manifestó en las calles y ejerció una presión para modificar las reglas de la contienda.
Fue hasta el 2014 cuando se hicieron nuevas reformas, por ejemplo, en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, la Ley General de Partidos Políticos y la Ley General en Materia de Delitos Electorales. En ellas se permitía que particulares donaran dinero a campañas y se autorizaba la reelección de diputados y alcaldes. Además, se fortalecía la equidad de género, las candidaturas independientes, la transparencia y se definían las acciones contrarias a las leyes electorales, entre otras cosas.
En esta misma reforma el IFE se transformó en INE, es decir Instituto Nacional Electoral, ya que normaría y vigilaría las elecciones a nivel nacional. Estas reformas dieron mayores facultades al INE, como fiscalizar el dinero de los partidos, avalar elecciones, autorizar partidos de nueva creación, sancionar candidatos y hasta quitar candidaturas, entre otras.
De la reforma de 2014, dos ideas principales, la primera, son establecidas las reelecciones para algunos cargos y las candidaturas independientes (entre otras cosas). La segunda, el IFE se transforma en INE, Instituto Nacional Electoral.
Como has aprendido a lo largo de la sesión, la democracia mexicana está en construcción. La gran mayoría de las reformas electorales tiene origen en contextos difíciles, tanto en el ámbito social, como en el político y el económico. Las transformaciones político electorales se han materializado por la presión de los partidos de oposición y de la ciudadanía.
La alternancia en el poder fue gradual, primero se abrieron espacio a los partidos de oposición en la cámara de diputados, luego en los municipios, después en los gobiernos estatales y, por último, en la presidencia de la república.
Con el triunfo electoral en 2018 de Andrés Manuel López Obrador la transición democrática se afianzó, por ser el primer presidente opositor al PRI y al PAN que logró posicionarse en el poder ejecutivo.
Observa y escucha el siguiente video del minuto 09:52 a 12:55.
- La transición democrática en México
https://ventana.televisioneducativa.gob.mx/educamedia/telesecundaria/3/28/5/1618
Sin la participación social la democracia no existe. En los últimos años se ha visto un desencanto en los procesos electorales, pero para que las elecciones funcionen se necesita de la acción ciudadana para mejorar las reglas y el funcionamiento del proceso electoral.
Recuerda que las reformas electorales fueron demandas del pueblo organizado que incluso costaron vidas. Hoy los ciudadanos organizan las elecciones; por ejemplo, alguno de sus familiares podría ser funcionario de casilla y contar los votos. Incluso tú, una vez cumplidos los 18 años, podrás hacerlo o participar de otro modo para definir a los gobernantes.
Es innegable lo mucho que se ha avanzado, de un sistema de partido único a uno donde coexisten más de siete partidos políticos. Pero también es innegable que la corrupción y la falta de imparcialidad de la autoridad electoral pueden dañar a la incipiente democracia y desalentar a la ciudadanía.
Protestas sociales
Aprendizaje esperado: Reconoce las causas del descontento y el proceso de la transición política en el México actual.
Énfasis: Reconocer las causas del surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional y de diversas protestas sociales.
¿Qué vamos a aprender?
Conocerás algunos de los diversos movimientos sociales que se desarrollaron durante las dos últimas décadas del siglo XX y principios del siglo XXI.
Así mismo, los motivos de su descontento, sus características y sus demandas.
De manera particular, revisarás las múltiples causas que dieron origen al levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN); sus características, la postura que tuvo el gobierno y la reacción de los distintos sectores de la sociedad ante dicho suceso.
¿Qué hacemos?
“Los movimientos sociales los realizan ciertos grupos para alcanzar determinados objetivos, pueden ser muy amplios o muy pequeños, según el momento o las circunstancias. No tienen una estructura como los sindicatos, los partidos políticos o el gobierno, por lo tanto, son acciones colectivas que surgen por causas económicas, políticas, sociales, culturales o ideológicas […].
Los movimientos sociales siempre están aspirando, sobre todo los locales, a resolver sus problemas. Para más adelante quizá construir uno de alcance nacional, “o tal vez, se podría decir que ese sería el fin último”, comenta [en entrevista el doctor Javier Aguilar García, del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM]. Esto con el objetivo de combatir u oponerse a un sistema económico o político.
“Los movimientos sociales siguen siendo actores que reivindican el respeto y garantía de los derechos ya existentes, pugnan por la no regresividad o pérdida de los mismos y participan en la creación de nuevos derechos —derechos emergentes— como parte de las exigencias de los diversos grupos de la sociedad, que cambian en la medida que cambian las sociedades mismas”, (…).
… con ello dan paso a la necesidad de construcción social de esos nuevos derechos para acceder a mejores niveles de bienestar y a la protección de los ciudadanos contra los abusos de las autoridades que detentan el poder político.
Por lo tanto, su propósito es lograr un cambio en las condiciones de vida que se tienen según el momento en el que surgen, además de que un aspecto que los caracteriza es que no tienen una dirección política. (…)
“En el periodo de la globalización surgen también movimientos sociales que son en gran medida transnacionales, debido a las facilidades que les otorgan las nuevas tecnologías de la información (principalmente Internet) para difundir la naturaleza y las causas de su movimiento”, destaca el doctor Javier Aguilar.
En la actualidad, el internet y las redes sociales han permeado distintas áreas de nuestra vida. Los movimientos sociales no han sido ajenos a esta situación; hoy, tan sólo con un clic, la información seleccionada puede llegar a un mayor número de personas en todo el mundo.
El universitario destaca que estas herramientas son utilizadas mayormente por los jóvenes, quienes, a través de sus teléfonos, tabletas y computadoras han impulsado la movilización de la sociedad.
“Durante el movimiento de 1968, la mayor parte de la propaganda se hacía en hojas impresas y los estudiantes salíamos a repartir por toda la ciudad; la prensa sólo comunicaba la versión que le daba el gobierno. No teníamos medios electrónicos, pero sí se logró difundir el movimiento. Hoy hay una gran diferencia, pues esas hojas se hacían en mimeógrafos y ahora las impresoras pueden sacar cientos de copias o con un clic es posible enviar la información y mucha gente la conoce rápidamente”, destaca.
Por lo tanto, (…) “a lo largo de la historia, los movimientos han establecido su propio patrimonio, es decir, su acumulación de experiencias acerca de las formas, tácticas y estrategias de organización para expresar su protesta y metas, a fin de alcanzar sus objetivos”.
Tal es el caso del movimiento #YoSoy132, el cual surge en 2012 en México y es impulsado por jóvenes universitarios, quienes demandaron principalmente la democratización de los medios de comunicación, en medio del proceso electoral que se vivía en esos momentos en nuestro país.
Otro caso que ha podido ser impulsado desde las tecnologías de la información se llevó a cabo en España, en donde apareció el movimiento 15-M, el cual surgió en 2011 porque los jóvenes demandaron el establecimiento de una verdadera democracia participativa y el final del bipartidismo.
Para este movimiento fueron los jóvenes quienes convocaron a la ciudadanía a través de las redes sociales para reunirse en la plaza central de Madrid y tuvo un gran poder de convocatoria.
Sin embargo, el doctor Aguilar García señala que, pese a que existe un gran apoyo a través de las redes digitales, lo importante de los movimientos sociales es que la gente se congregue e impulse una acción colectiva, la cual sólo podrá llevarse a cabo con la reunión en vivo de la gente”.
Con base en el texto, reflexiona a partir de las siguientes interrogantes.
¿Te has enterado sobre algún movimiento social en la actualidad? ¿Cuáles son sus demandas? ¿Alguno de ellos se ha difundido a través de las redes sociales?
Analiza las siguientes imágenes y responde las preguntas.
¿Qué observas en la fotografía? ¿Por qué crees que las personas llevan sus rostros cubiertos?
¿Qué sector social destaca en la fotografía? ¿Por qué crees que estén organizados de esa manera?
¿Qué sector social destaca en la fotografía? ¿Qué crees que estén exigiendo?
En estas tres fotografías puedes identificar diversos sectores de la sociedad. Seguramente te diste cuenta de que en ellas aparecen personas congregadas para manifestarse y expresar sus demandas de manera colectiva.
Como recordarás, en la sesión anterior aprendiste acerca de la transición política en México y la democratización electoral. Un factor decisivo en este proceso fue la creciente participación ciudadana. El descontento por la situación política y económica despertó en algunos sectores sociales el sentimiento de inconformidad y el pulso por protestar.
En las últimas décadas del siglo XX y las primeras del XXI hubo un auge de protestas sociales en las que se expresaban, de manera general, el rechazo hacia ciertas medidas gubernamentales y la demanda de mejora a las condiciones de vida de la población.
Algunos sectores sociales que protagonizaron estas protestas se mostraban dispuestos a dialogar con las autoridades y buscar canales legales para solucionar sus conflictos y evitar la represión por parte de las autoridades. Las causas del descontento fueron múltiples, pero predominaron las originadas por la pérdida del poder adquisitivo del salario, el encarecimiento y la escasez de los artículos de primera necesidad, el desempleo masivo en el campo y en la ciudad. Por su parte, los sectores estudiantiles alzaban sus voces impacientes por el precario desarrollo del sistema educativo, la falta de espacios para expresarse y el rechazo al autoritarismo.
Para conocer y ampliar más tus conocimientos, observa el siguiente video del minuto 05:25 a 07:35.
- Protestas e Inconformidades: movimientos sociales en México
https://ventana.televisioneducativa.gob.mx/educamedia/telesecundaria/3/28/5/1617
Otro ejemplo de movimientos sociales es el que surgió como consecuencia del terremoto de 1985 que afectó a la ciudad de México y otras regiones del país. La población se organizó en diferentes frentes y de distintas maneras ante la manifiesta incapacidad del gobierno para enfrentar este desastre. Esta respuesta organizada y solidaria de la ciudadanía se ha repetido en diversas ocasiones, por ejemplo, tras el sismo del 2017.
Volviendo a 1985, la sociedad civil se organizó de tal forma que rebasó a los gobiernos federal y capitalino, e incluso a los propios partidos políticos, varios de los cuales mostraron la misma lentitud que el gobierno.
Como resultado de este desastre se incrementó la demanda de vivienda y servicios, surgieron algunas organizaciones como la Coordinadora Única de Damnificados (CUD), la Coordinadora de Cuartos de Azotea de Tlatelolco y, posteriormente, la Asamblea de Barrios.
Otro movimiento que surgió a raíz de esta tragedia fue el de las costureras. Muchas murieron bajo los escombros en sus lugares de trabajo; esto evidenció las pésimas condiciones laborales y que buena parte de los inmuebles donde se encontraban los talleres no habían sido construidos para soportar maquinaria pesada.
Las demandas del movimiento de costureras fueron la defensa del puesto de trabajo, la indemnización y la organización de un sindicato independiente; éste obtuvo su registro el 21 de octubre de ese mismo año y logró conseguir mejores condiciones laborales y en algunos casos la indemnización para las víctimas.
En este proceso hay que destacar el apoyo de agrupaciones feministas, tales como el Colectivo Revolución Integral, el Grupo Autónomo de Mujeres Universitarias, las jóvenes de la revista “La Guillotina” por mencionar algunas, quienes se sumaron a la lucha de las costureras, organizaron reuniones para discutir la situación y hacer algo al respecto, como fundar un sindicato.
En 1986 se creó el Consejo Estudiantil Universitario que encabezó un amplio movimiento en contra de las reformas propuestas por el entonces rector Jorge Carpizo, las cuales afectaban a los estudiantes, profesores y trabajadores. Dicha reforma pretendía incrementar el monto de las colegiaturas, atentando contra la gratuidad de la educación pública, y eliminar el llamado “pase automático” del bachillerato a la licenciatura, entre otras modificaciones.
El CEU denunció que estas medidas eran fundamentalmente administrativas y que no tocaban a fondo la problemática universitaria. Por lo cual, planteó la necesidad de crear más oportunidades educativas, exigiendo el aumento de los presupuestos públicos destinados a la enseñanza universitaria.
Mediante una serie de manifestaciones y una huelga estudiantil, en 1987 el movimiento del CEU logró la suspensión de la reforma de Carpizo. Se llegó a un acuerdo, entre las autoridades y los líderes del CEU, de analizar las reformas que necesitaba la UNAM en un congreso representado por la comunidad universitaria, es decir estudiantes, docentes, investigadores y funcionarios.
Los campesinos fueron otro sector que destacó en este período, al organizarse y protestar por el abandono al campo. La crisis del sector agropecuario implicó la pérdida de la autosuficiencia alimentaria y el desplome de los precios internacionales de los productos agrícolas. Al mismo tiempo, se acentuó la represión y violencia en contra de los campesinos.
En cuanto a sus demandas, fueron muy diversas, dotación de tierra, servicios, crédito, alto a la represión, defensa de los recursos naturales, por mencionar algunas. Sus acciones generalmente fueron protestas, denuncias y peticiones aisladas.
En 1985 surgió la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas, agrupando a cerca de 25 organizaciones de productores de todo el país, que anteriormente habían utilizado formas de protesta radical y la movilización masiva de los campesinos. Sin embargo, al unirse la mayor parte de sus denuncias fueron negociadas con autoridades federales.
Otro movimiento a destacar es el del “Barzón”. Éste sintetizó varios aspectos de la crisis y los movimientos sociales. Nace como consecuencia del grave problema de los créditos del campo.
Pero, ¿por qué se llamó de esa manera? Pues bien, el movimiento tomó su nombre de una canción agrarista de principios del siglo XX, que relataba las condiciones de explotación a las que estaban sometidos los campesinos.
Técnicamente el barzón es una cinta de cuero que ciñe a los bueyes con la yunta.
El corrido comienza con unos versos sumamente conocidos.
“A esas tierras del rincón,
Las sembré con un buey pando.
Se me reventó el barzón,
Y sigue la yunta andando”.
Observa el siguiente video del minuto 07:36 a 10:20 para iniciar el análisis de otro movimiento social de relevancia en el país y el mundo.
- Protestas e Inconformidades: movimientos sociales en México
https://ventana.televisioneducativa.gob.mx/educamedia/telesecundaria/3/28/5/1617
El primero de enero de 1994, el mismo día que México ingresó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte, una rebelión armada estalló en los Altos de Chiapas.
Principalmente a través de las radiodifusoras y de la televisión, el resto de la población mexicana supo que un grupo de combatientes se apoderó de siete cabeceras municipales.
Se trataba del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), compuesto esencialmente por hombres y mujeres pertenecientes a núcleos indígenas originarios de esa región, tales como tzeltales, choles y tzotziles, de antiguas raíces maya-quiché.
El origen del Movimiento Zapatista de Liberación Nacional se puede explicar por la marginación económica y social que aquejaba a la población indígena en Chiapas, pues era uno de los estados más atrasados del país en salud, educación, alimentación y comunicaciones, a pesar de sus abundantes recursos naturales. Esta situación determinó la necesidad de organizarse para encontrar la solución a sus problemas ancestrales, entre los que destacaban: obtener garantías en la tenencia de sus tierras, ganar espacios de participación política y mejorar sus condiciones de vida.
Por otra parte, el EZLN exigía la destitución de Carlos Salinas de Gortari de la presidencia de la República y una real democratización de la sociedad; insistiendo en la poca capacidad de los partidos políticos para emprender y sostener este proceso.
Los dirigentes zapatistas hicieron un llamado al pueblo mexicano para unirse a sus filas, promoviéndose a sí mismos como una organización civil y pacífica, como una fuerza política cuyos integrantes no aspiran al poder. Afirmaban que no eran un partido político; sólo pretendían que los gobernadores cumplieran y obedecieran al pueblo.
El levantamiento indígena de Chiapas modificó el escenario político de 1994. Los primeros días del año la respuesta del gobierno federal fue movilizar varias unidades del ejército con el objetivo de sofocar la rebelión. Durante 12 días se persiguió a los rebeldes que se replegaron a distintas zonas de la selva. Diversos sectores sociales del país y del extranjero demandaron el alto al fuego y la búsqueda de un diálogo con las fuerzas zapatistas.
La presión nacional e internacional obligó a las autoridades mexicanas a implementar una estrategia de pacificación. Así comenzó una segunda etapa durante la cual se lograron cambios en el gabinete, el cese al fuego y la amnistía, es decir, el perdón que el Estado ofrecía a los rebeldes.
El proceso de paz se extendió por varios años, pero sólo se alcanzaron acuerdos mínimos. Las demandas zapatistas se cumplieron de manera parcial y paulatina, a pesar de ello en 2005 el EZLN emitió la sexta declaración de la Selva Lacandona, en la cual anunció que dejaría las armas, aunque el movimiento sigue activo hasta la fecha.
Pues bien, como has visto a lo largo de esta sesión, en las protestas sociales durante las últimas décadas se involucraron diversos sectores de la sociedad. Algunas se transformaron en sindicatos, otras agrupaciones se fortalecieron, como las campesinas, o se convirtieron en organizaciones civiles, y otras transitaron de la vía armada a la vía pacífica.
La expresión del descontento social a través de la protesta, la movilización y la conformación de organizaciones civiles ha ejercido presión sobre las autoridades de nuestro país para que garanticen el acceso de todos sus ciudadanos a una vida digna, con base en la justicia, la libertad y la democracia.
Hoy en día los mexicanos están cada vez más convencidos de la necesidad de ampliar los ámbitos de participación ciudadana y el respeto por los derechos humanos.
Realidades sociales
Aprendizaje esperado: Explica la multicausalidad de los problemas sociales del país en la actualidad y la importancia de la participación ciudadana en la solución de problemas.
Énfasis: Explicar las causas de la pobreza, la expansión urbana y el desempleo, así como el impacto de las políticas de población y control natal.
¿Qué vamos a aprender?
En la actualidad la sociedad enfrente diversos retos, aprenderás algunos de los más relevantes, y la manera por medio de la cual nuestro país los ha enfrentado en las últimas décadas.
¿Qué hacemos?
Para comenzar, lee algunos fragmentos del libro "México Profundo, Una civilización negada", el reconocido antropólogo mexicano Guillermo Bonfil Batalla, quien en 1987 publicó este texto para compartir su punto de vista respecto al cambio que experimentó México en aquellos años
EL PAÍS QUE HOY TENEMOS
La quiebra de una ilusión.
“Todo fue muy rápido. Bastaron unos cuantos años para pasar de la euforia del espejismo petrolero, a fines de los setenta, a la certeza de que el modelo de desarrollo que se había impuesto al país había llegado a su término y ya no daba más (lo que fue evidente en diciembre de 1982). Hubo que dejar de creer en milagros, en inmensas riquezas que aparecían de pronto y nos aseguraban la solución definitiva de todos los problemas.
Milagro inmerecido, por otra parte, ya que nunca fue resultado de una serie de esfuerzos que el país hubiera hecho de manera constante y racional para generar la riqueza que necesita ni para resolver los problemas que lo agobian.
De pronto pareció que todos los errores, la cadena interminable de absurdos, incompetencias y miopías, no lo eran tanto y en última instancia, quedaban justificados por el resultado final: un país cuyo único reto era aprender a administrar la abundancia. Poco después la falsa ilusión y el triunfalismo del México imaginario se derrumbaron estrepitosamente. El país que queda es otro, muy diferente del que se soñaba en los breves años de la última euforia.
Hoy debemos aceptar que México es un país pobre. Que grandes extensiones de tierra no son aptas para un cultivo “moderno” y que otras se han erosionado y producen menos porque se explotaron de manera irracional.
Que las cosas han ido hasta el extremo de que nuestra agricultura no cosecha los suficientes productos básicos que se requieren para alimentar a los mexicanos siquiera en el nivel mínimo indispensable. Crece nuestra dependencia por hambre: el país en el que se inventó el maíz importa ahora maíz.
Nuestra industria no está integrada en la medida suficiente para atender las necesidades básicas del mercado nacional. Se producen muchas cosas superfluas y, en cambio, no se fabrican otras que serían necesarias. ¿Cuánto se gasta en México para producir, promover y consumir alimentos chatarra, refrescos embotellados, bebidas alcohólicas, envases desechables?, ¿Cuánto cuesta, en este país pobre, crear un empleo industrial destinado a fabricar basura?
Al tocar este punto no puede pasarse por alto una mención al papel que juega la publicidad como fuerza inductora para imponer modelos de consumo que, para decirlo en dos palabras, empobrecen y deterioran al consumidor (…)
(…) Y dentro de la pobreza general, una desigualdad económica que debería resultar intolerablemente escandalosa. El despilfarro y el derroche más burdos e insultantes frente a la incapacidad de atender las necesidades más elementales de millones de compatriotas. (¿Compatriotas?, ¿tendrán en verdad la misma patria los mexicanos que aseguran su dinero en los Estados Unidos?). La crisis ha hecho más ricos a los más ricos y más pobres a todos los demás. El fin del milagro pone en evidencia, para quién lo dudara, la tendencia profunda de la desigualdad que ha estado implícita en el proyecto nacional”.
¿Cuál creen que fue el proceso que transformó el optimismo mexicano?, ¿Consideran que la responsabilidad recae, únicamente, en los actores políticos?, ¿Cuál sería el papel de la sociedad en ese aspecto?
Intenta dar respuesta a estas preguntas. Como aprendiste en Historia de primer grado, las naciones árabes que formaban parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPED) se negaron a surtir crudo a las naciones occidentales, esto como represalia por el apoyo que los Estados Unidos y Francia habían dado a Israel en la Guerra del Yom Kippur.
Este acontecimiento elevó por cinco el precio normal del petróleo lo cual fue aprovechado por México para sobrevalorar la abundancia de sus reservas petroleras recién descubiertas en el Golfo de México. De esta forma, el gobierno consiguió un nuevo préstamo en el extranjero para financiar los proyectos de desarrollo social.
Sin embargo, los eventos que siguieron estuvieron llenos de dificultades pues el precio del petróleo se desplomó provocando una serie de devaluaciones y el descontrol de la inflación.
La solución que el gobierno encontró para solucionar este problema fue endeudarse de nuevo. Pero esta vez México, al igual que varios países de América Latina, tuvo que aceptar las condiciones de los organismos financieros internaciones, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
Estos organismos exigieron una transformación profunda en la administración de la economía, principalmente la eliminación del proteccionismo que había caracterizado el desarrollo de la industria mexicana. El país adoptó un nuevo modelo económico, lo que significó una menor participación del Estado y la entrada de México al comercio internacional. Como resultado de dicho proceso se aseguró que el nivel de vida de los mexicanos iba a mejorar, pero esto no ocurrió y la desigualdad se intensificó.
La pobreza, la marginación y el desempleo, son problemas mundiales, que según la Organización de las Naciones Unidas afectan a más de 736 millones de personas en todo el mundo. En México afecta sobre todo a niñas y niños, mujeres e indígenas, tanto en áreas rurales como urbanas.
En esta sesión a conocerás sus causas, así como la influencia que las políticas de control natal tuvieron en el desarrollo de la población.
Pero antes sería importante preguntarte ¿qué es la pobreza?, ¿qué provoca este fenómeno?, ¿qué acciones puede tomar el gobierno para transformarla y garantizar un mejor nivel de vida de las personas?, ¿cuál es el papel que como sociedad y cómo individuos puedes tomar para disminuir este problema?
Las respuestas a estas preguntas están condicionadas por la diversidad gráfica y cultural tan amplia que te rodea, porque la pobreza en cada región requiere distintas medidas para contrarrestarla.
Observa esta entrevista realizada hace unos años al investigador Sergio Aguayo. Presta atención a las características de los principales retos que el país debe enfrentar. Observa del inicio al minuto 05:03.
- Problemas y realidades: El futuro de México
Entrevista a Sergio Aguayo
https://ventana.televisioneducativa.gob.mx/educamedia/telesecundaria/3/28/5/1623
Los problemas a los que el país debía hacer frente eran muy complejas.
La pobreza tiene distintas dimensiones, el Consejo Nacional de evaluación de la política de Desarrollo Social (CONEVAL) distingue las siguientes: existe la pobreza patrimonial donde el total del ingreso impide adquirir un lugar donde vivir. También está la pobreza de capacidades, que es cuando los recursos con los que cuenta una familia no alcanzan para ejercer los derechos a la salud y la educación, debiendo endeudarse para pagar los gastos de un familiar enfermo, o verse obligados a abandonar totalmente la escuela para ayudar a completar el gasto familiar.
Pero sin duda, ninguna es más urgente de atender que la pobreza extrema, la cual implica que una persona no tiene la posibilidad de alimentarse al menos tres veces al día, heredando casi siempre esta condición a sus descendientes. Se calcula que, en México 52 millones de personas padecen algún grado de pobreza y, al menos, 10 millones de habitantes padecen pobreza extrema.
¿Pero qué ha generado esta situación? Comienza por estudiar algunas de sus causas.
Las constantes crisis económicas internas, sobre todo en 1982 y 1994, y las crisis internacionales, como la de 2009, provocaron que nuestro país emprendiera varias reformas estructurales que, si bien permitieron solucionar momentáneamente el problema de la devaluación de nuestra moneda y atraer inversión extranjera, no impulsaron la creación de empleos bien remunerados y con derechos laborales.
Las medidas que gobiernos como el de Miguel de la Madrid adoptaron para reestructurar la economía se tradujeron en una mayor inflación, que como ya se ha mencionado, es la manera de llamar al incremento en el costo de algún producto.
Por un lado, se llevó a cabo la privatización o venta de varias empresas que eran propiedad del Estado. Por el otro, disminuyeron paulatinamente los subsidios, principalmente aquellos que se otorgaban a los agricultores y campesinos.
Asimismo, fueron disueltas varias empresas paraestatales que absorbían la producción y distribución de los productos como el café y el tabaco, dejando que los productores se hicieran cargo de sus cosechas y muchos de ellos quedaron desprotegidos al no tener un intermediario que defendiera sus derechos ante la apertura comercial. A corto plazo, esto repercutió en las comunidades agrícolas intensificando aún más la pobreza en esas zonas.
Aunado a esto, muchos apoyos que se otorgaban a los sectores más desfavorecidos fueron otorgados a cambio de la lealtad política de ciertos sectores por lo que, en ocasiones, la ayuda no llegó a quien más lo necesitaba.
En el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, el desarrollo económico del país no había podido abatir los índices de pobreza y la desigualdad se incrementó, sobre todo en 1994 cuando México entró al Tratado de Libre comercio de América del Norte.
A partir de entonces se registró un incremento en las corrientes migratorias a nivel interno. En el siguiente mapa puedes apreciar cómo la pobreza y desigualdad se vinculan con la diversidad geográfica de México. Mientras que en el norte del territorio una mayor industrialización permitió reducir la precariedad, los habitantes de los estados del sur, tuvieron que migrar hacia las ciudades del interior del país o a las zonas turísticas. La migración incluso llevó a millones de mexicanos a cruzar la frontera con los Estados Unidos en busca de una mejor calidad de vida.
La migración ha modificado la distribución de la población en México. En las últimas décadas la mayoría de la población mexicana se concentró en las ciudades, mientras que los habitantes de las zonas rurales disminuyeron de manera constante. Hoy en día sólo 21% de la población habita en una zona rural. El abandono del campo ha propiciado que cada vez más se tenga que recurrir a la importación de alimentos.
Aunque pudiera pensarse que vivir en una ciudad garantiza una mejor calidad de vida, esto no siempre se cumple. Se estima que al menos 41% de las personas que viven en localidades urbanas padece algún tipo de pobreza.
Actualmente existen más de 59 zonas metropolitanas en todo el país, se habla de ciudades que llegan a tener más de 50 mil habitantes o incluso varios millones como Toluca, Puebla, Cuernavaca, Guanajuato, Pachuca, Monterrey o Mérida, y comparten muchas dificultades.
La marginación urbana, por ejemplo, se trata de un tipo de desigualdad que es producida por condiciones económicas, que excluyen a una parte de la población del desarrollo y sus beneficios.
La llegada de miles de personas ha acentuado el problema de la marginación urbana pues se han visto obligados a vivir en terrenos peligrosos como laderas y cerros, que se pueden derrumbar o deslavar por el tipo de suelo o las lluvias constantes. A estas condiciones habría que agregar que el gobierno no ha sido capaz de garantizar servicios como pavimentación, agua potable o electricidad a estas localidades carentes de planeación.
El desempleo es otro reto que aqueja a las zonas metropolitanas, impidiendo que muchas familias adquieran una vivienda propia o puedan ahorrar para tener un fondo de pensión para el retiro. Lo que resulta más preocupante es que las personas que no cuentan con empleo formal, no puedan acceder a un sistema de salud o no tengan acceso a una alimentación adecuada.
Para intentar subsanar esta situación los gobiernos de los últimos sexenios, han creado programas sociales para disminuir la marginación y la pobreza. Como el programa Oportunidades que estuvo vigente del año 2006 al 2012, el programa Prospera de 2012 a 2018 y actualmente, el programa de Seguridad Alimentaria, Segalmex.
Entre sus propósitos destacan llevar alimentos a las comunidades más apartadas, tanto rurales como urbanas. A pesar de los logros obtenidos, aún queda mucho por hacer para superar estos desafíos.
La educación es otro factor asociado a la marginación, la pobreza y la desigualdad. Si bien es cierto que el analfabetismo ha disminuido, el nivel educativo de la población se encuentra en términos generales en segundo grado de educación secundaria, pocas personas llegan a terminar una carrera o tener un posgrado. Aunque la ley establece que la educación es obligatoria en el país hasta el bachillerato, muchos adolescentes se ven obligados a trabajar y, por lo tanto, abandonan la escuela. Esto se traduce en pocas oportunidades laborales y de desarrollo.
Cabe destacar que una estrategia que ha dado resultados satisfactorios en el combate a la pobreza y la desigualdad han sido las políticas de control natal. El número de hijos que tiene cada familia mexicana, se ha reducido de manera significativa en las últimas décadas. Mientras en los años setenta cada mujer tenía en promedio 7 hijos, esto se redujo a 4 en los años ochenta y, en la actualidad, a solo 2.
En este sentido, los objetivos del Consejo Nacional de Población Conapo, han resultado exitosos.
Bajo el lema “La familia pequeña vive mejor”, el Conapo lanzó una campaña en los medios de comunicación para sensibilizar a la población sobre las ventajas de la planificación familiar y el uso de métodos anticonceptivos. Permitiendo así que la ciudadanía, a través de la información brindada, optara por lo más conveniente.
Actualmente México ocupa el onceavo lugar a nivel mundial en población, con poco más de 126 millones de habitantes. Si analizas la gráfica, te podrás dar cuenta que la población casi se ha duplicado desde 1980, pero se ha reducido el índice de crecimiento por década.
Para conocer sobre esta campaña observa la siguiente cápsula del tiempo elaborada por el Consejo Nacional de Población. Presta atención a los mensajes de las décadas anteriores.
- Cápsula del tiempo CONAPO
¿Crees que los mensajes de esta campaña todavía son vigentes?
Aunque México es uno de los países más poblados del mundo, ha logrado controlar los índices de natalidad. Gracias a la implementación de políticas públicas, como las campañas difusión de métodos anticonceptivos la ciudadanía se ha sensibilizado sobre los beneficios de tener una familia pequeña.
Además, también se ha fomentado el derecho que tienen las mujeres para decidir sobre sus cuerpos y buscar un mejor desarrollo profesional.
Como aprendiste a lo largo de esta sesión la pobreza, la expansión urbana y la marginación son algunos de los principales desafíos que enfrenta nuestro país.
Hace falta mantener y mejorar las políticas públicas para generar nuevos y mejores empleos, así como garantizar que todos los ciudadanos de este país logren satisfacer todas sus necesidades esenciales.
Ninguna de estas realidades son ajenas, y sólo conociéndolas puedes participar en su transformación.